La Generación Progre.

En cada época o etapa política a través de la historia moderna del país han surgido grupos o tribus de jóvenes  que de una u otra forma se han caracterizado por subsistir del  poder político y económico  que han heredado por linea directa de su parentesco (hijos de políticos encumbrados) o por disfrutar  del poder  a través de sus padrinos políticos. Siempre han sido una generación privilegiada, en su mayoría burgueses de clase alta.  En alguna época fueron nombrados  los Cachorros de la Revolución,  generación denominada así por su cercanía con los generales  revolucionarios. Vicente Lombardo Toledano acuñó esa frase para nombrar a Miguel Alemán Valdés quien gozaba del cariño y reconocimiento  del Gral. Lázaro Cárdenas cuando fue nombrado candidato presidencial.      En otra época mas reciente  lo fueron los tecnócratas, jóvenes burgueses de ultra derecha  que  arribaron al poder con la llegada  del Salinato y del neoliberalismo, quienes egresados en economía  de las mas prestigiadas universidades norteamericanas se decían  que habían sido educados para ejercer el poder. La izquierda no se salva de tener a su generación de jóvenes que la caracteriza. Ahora  en esta cuarta transformación de la república y con el triunfo de la izquierda,  ha surgido aunque aun con cierta mesura la generación Progre. Este termino ha sido utilizado desde la época de los setentas principalmente en España después de la caída del franquismo y la llegada al poder del socialismo español. Sin embargo con la polarización política que existe actualmente entre la  izquierda y derecha en México,  la denominación  entre una y otra pasa por los apodos de chairos y fifis para llamar peroyativamente a los liberales  y conservadores, a los de la izquierda y a los de la derecha. Pero el termino chairo no debe confundirse con el de  Progre. Hay mucha diferencia. Se puede decir que el Chairo es el miembro del pueblo caracterizado por ser  fiel seguidor y defensor de la 4T y los Fifis son los defensores de la derecha conservadora. Sobre la denominación de Progre  la politóloga guatemalteca Gloria Alvarez nos dice en un su libro titulado Como hablar con un Progre que  "el Progre es un burgués que no reconoce serlo, que no renuncia a su vida cómoda, pese que dichas comodidades que tanto aprecia vienen  de su principal enemigo: el capitalismo" y remata diciendo " ser Progre es  la incoherencia de ser un burgués con ideas de izquierda". Ser Progre entonces queda muy de lejos de  aquella frase de Salvador Allende,  icono socialista y de la  izquierda latinoamericana  para conceptualizar a los jóvenes: "ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica".   Lo que es una realidad es el surgimiento de jóvenes  personajes de clase alta, burgueses  cobijados por poder de sus progenitores y de sus padrinos,  que ocupan espacios políticos bajo la sombra de ellos.  Esta es la nueva generación Progre, que siendo hijos de la burguesía adoptan una ideología por conveniencia  y que sin duda es incoherente con su clase social, ser de izquierda. Quizás no le sean de ayuda a la 4T, no aporten ideas nuevas ni sean progresistas, tampoco ejerzan un liderazgo significativo  pero el  surgimiento de la generación Progre es uno de esos fenómenos sociales que trae consigo el poder político y que ha sido tradición  entre la clase política del país,  contribuyendo  a esa polarización y ese  clasismo que existe entre los mexicanos y que por ninguna manera debe ser aceptado. 

Carlos Sandy.