El liderazgo y el enfoque hacia lo pedagógico.


El liderazgo y su enfoque hacia lo pedagógico. 
Introducción.-
Estudiar el  liderazgo es importante por ser un tema moderno, actual y necesario para entender su aplicación en la dirección  de organizaciones complejas como lo son las empresas privadas,  la administración pública, de las organizaciones políticas, sindicales, sociales y  educativas, así como  el liderazgo dentro de  la más pequeña organización social  como lo es la familia o  en un grupos de amigos donde seguramente se desarrolla.
El liderazgo ha sido objeto de muchos estudios en los diversos campos del conocimiento como lo son  la psicología, la pedagogía y la administración.  Es en la administración donde ha recibido el enfoque gerencial  como sinónimo de  éxito de una empresa, la cual  dependerá de un líder exitoso.  El presente ensayo analiza los conceptos del liderazgo, sus características, los  tipos  y se enfoca a analizar la importancia del liderazgo pedagógico, en el ámbito de la educación.
Líder es la persona a la que un grupo sigue, reconoce y acepta como orientadora. Es quien tiene la capacidad de movilizar  los demás para que actúen eficientemente con el fin de conseguir los objetivos que entre todos se ha acordado, para cumplir con la obligaciones de un ejercicio profesional o de gestión.
El liderazgo es el arte de motivar, comandar y conducir a personas. Proviene de la raíz inglesa leader que significa líder y se compone con el sufijo azgo que indica condición o estado. Liderazgo es la cualidad de una persona para estar en el status de Líder. 
El rol del  liderazgo se puede asumir de forma natural cuando una persona se destaca con el papel de líder sin necesidad de poseer una posición o un cargo que lo faculten como tal. Este es un tipo de liderazgo informal. Cuando un líder es elegido por una organización y comienza a asumir una posición de autoridad ejerce un liderazgo formal.
El líder proporciona la cohesión necesaria para lograr los objetivos del grupo. Un líder efectivo o eficaz sabe cómo motivar a los elementos de su grupo o equipo.
Las habilidades de un líder implican tener carisma, paciencia, respeto, integridad, conocimiento, inteligencia, disciplina y sobre todo capacidad para influir en los subordinados. También debe ser visionario y tener una capacidad d comunicación para conseguir guiar a su equipo. 
Los tres tipos o estilos clásicos de liderazgo según la teoría  del psicólogo alemán Kurt Lewin  son el autocrático, el democrático y el liberal. Lo explica de la siguiente manera.
El liderazgo autocrático es aquel donde el líder impone sus ideas y decisiones sin consultar ni solicitar opinión alguna.
El liderazgo democrático es el que simula la participación del grupo, es participativo y la toma de decisiones se hace en conjunto escuchando la opción de todos.
El liderazgo liberal promueve la libertad y total confianza en el grupo, las decisiones son delegadas y la participación del líder es limitada.
Para Lewin el liderazgo democrático era el ideal, sin embargo este tipo de liderazgo conlleva cierto riesgo de que se produzca una pérdida de  eficiencia en relación a la toma de decisiones colectiva. 
Kurt Lewin realizó varias aportaciones al ámbito de la psicología de las organizaciones y del trabajo. (1) (social.)
Para desarrollar un liderazgo efectivo se requieren poseer varias características o habilidades que se deben desarrollar.  Debe tener visión, para  liderar se implica tener una visión y compartirla con los demás. Esta visión debe ser compartida con los demás para determinar las metas comunes. Ser motivador,  el líder sabe motivar, es una de sus principales funciones como gestor de personas, despertar esas motivaciones internas y externas de su equipo.  Ser servicial, el líder está al servicio del equipo y no al revés. Tener empatía, debe poseer esa  capacidad innata de ponerse en el lugar de los demás, de comprender la problemática que se presente  y encontrar la solución. Ser creativo,  hacer uso de la imaginación, respetando la creatividad de los demás. Ser exigente,  solamente un líder exigente podrá lograr los éxitos deseados. Saber dirigir, el líder  tiene que ser la guía de su equipo hasta lograr el éxito deseado. Trabajar en equipo, reconocer cuando algo no va bien y saber corregir así como estimular al equipo cuando algo va bien. Asumir riesgos, el líder asume riesgos  que nadie se atreve a hacer y debe tener el valor cuando algo no va bien de aceptarlo  para corregirlo. El verdadero líder busca la mejora continua elaborando su planeación, su diagnóstico y realizando evaluaciones sistemáticas. (2) (equipos., 2019)
Otra forma   de liderazgo que se ha estudiado es el liderazgo compartido. “La conveniencia de compartir el liderazgo no es nueva. Puede llegarse fácilmente a esa conclusión después de cualquier proceso reflexivo sobre la tarea de dirigir. En los últimos años esta idea se ha reforzado y cada vez parece más evidente la tendencia al liderazgo distribuido”. (3) (Antunez, 2012)   
Saber delegar es también una habilidad que debe desarrollar un líder ejerciendo esa capacidad de convencimiento de que las cosas se pueden realizar con éxito si se realizan con la supervisión del líder, ejerciendo  un liderazgo compartido. Un verdadero líder sabe delegar y orientar el esfuerzo de su equipo de trabajo hacia los objetivos propuestos. Un líder autócrata pretenderá realizar todo el mismo.
El liderazgo también debe ser estudiado en su enfoque pedagógico,  analizado en el ámbito educativo y comprender su importancia y  la dimensión de su ejercicio.  Veamos la siguiente premisa. El maestro ejerce un liderazgo natural sin duda. Si cada docente  al enseñar ejerce un   liderazgo en su grupo de clases entonces ¿sus alumnos  serán líderes potenciales al aprender?  El campo de la psicología y la educación están ligados indiscutiblemente   no importando del nivel educativo que sea. El éxito de los sistemas educativos radica en el tipo de liderazgo que se ejerce desde las aulas, lugar donde se forman  las generaciones de los  futuros ciudadanos de cada país. Este liderazgo  nos dice Paulo Freire se traduce en un llamado liderazgo pedagógico,  denominado  así para clarificar la función de un docente frente a su grupo  señalando que   “los líderes guían instituciones educativas en el establecimiento de direcciones claras, en el establecimiento de  sus objetivos precisos,  así como en la  promoción de un aprendizaje efectivo con sus alumnos.”(4) (Freire, 2019)    Este rol de liderazgo pedagógico es sin duda un ejemplo de un liderazgo compartido, de un liderazgo que es  rotativo en su quehacer. Enseñar a aprender es sin duda una actividad que debe ser compartida. Al aprender te conviertes en un líder o ejerces por naturaleza un liderazgo pedagógico ante los que  todavía  vas a enseñar o ante los que van aprender. ¿Cómo explicar esto? El liderazgo pedagógico se ejerce al enseñar pero también  se ejerce al aprender y quien aprende se convierte en un líder potencial para enseñar posteriormente.  En este colectivo de aprendizaje conformado por  docentes-alumnos se ejerce un rol compartido de liderazgos,   en la que todos los actores participan en el aprendizaje,  ejerciendo el liderazgo pedagógico de enseñar-aprender en algún momento. El maestro junto con el alumno   juega ese papel  de ser un  binomio educativo,  regido por un liderazgo,  en el   que cada uno comparte sus conocimientos y se vuelve democrático, siendo rotativo  en cada momento del proceso de enseñanza aprendizaje,  proceso que puede ser infinito.
El liderazgo se puede comprender como  el arte de motivar a los demás para ejercer y  lograr algún objetivo, para realizar alguna función o para llegar a alguna meta.
El liderazgo democrático se convierte en el liderazgo ideal según Kurt Lewin.
El liderazgo y su enfoque hacia lo pedagógico  puede interpretarse como el arte de enseñar y compartir el aprendizaje, entendiendo que quien aprende también puede  enseñar, ejerciendo en su momento un liderazgo pedagógico dentro del  proceso   enseñanza-aprendizaje, al convertirse en un líder  entre  sus pares.  Ejerce ese liderazgo compartido en cada momento del proceso de enseñanza aprendizaje, en el momento de compartir sus  conocimientos, en el momento de ser democrático, en el momento de actuar dentro de  ese binomio  denominado maestro-alumno.  De esta manera se logra a través del liderazgo pedagógico  una  cooperatividad   como lo ha propuesto el pedagogo  Herman Val de Velde en su teoría de la educación cooperativista o cooperación genuina,  que es la base de una educación alternativa. (5) (Velde, 2010)   
Carlos Sandy.

BIBLIOGRAFIA

Antunez, S. (2012). Una brújula para la direccion escolar. S.M.
equipos., L. y. (2019). game-learn.com. Obtenido de www.game.com
Freire, S. y. (03 de septiembre de 2019). El rol de la direccion en la escuela. Obtenido de https:/ww.grade.org.pe/wp-content/uploads pdf
social., K. L. (s.f.). psicologíaymente.com. Obtenido de https://psicologiaymente.com/organizaciones/estilos-liderazgo-lewin
Velde, H. V. (2010). La cooperación genuina, base de una educación alternativa. Estelí, Nicaragua.: FAREM.







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